Nuevas evocaciones ilustran este Blog para que todos los bosqueños nativos y profundos rememoren aquéllas remotas calendas de la década 60-70, expuesta en las fotos que en la presente entrada se exhiben, donde aparecen remozados –aunque poco fotogénicos- agrupaciones de los que aún están entre nosotros. Para los que se fueron queda nuestro vivo recuerdo. La calidad de las improntas deja mucho que desear, no sólo por la prehistórica tecnología existente durante la época en solfa, si no porque se advierte en ellas la autoría de algún diletante espontáneo, que tuvo el acierto y el gran mérito de inmortalizar a los presentes, y a los paisajes cuasi ignotos que se columbran. Algo es algo; en este caso, mucho para nosotros. Total, con algo de esfuerzo, paciencia, una lupa e imaginación, seguro que todos los coetáneos acabamos descubriendo quien es quien. ¿Lo intentamos?…“EL TIEMPO SE TORNARÁ AMARILLO SOBRE MI RETRATO”...
E.V.S.
3 comentarios:
Los recuerdos, invernaderos de alegrías pasadas son los pelos blancos, las canas del corazón.
Un abrazo.
Me invade la nostalgia al ver tantos rostros conocidos - alguno me tuvo en sus brazos - y que se fueron para siempre... Todo pasa y todo queda.
Un abrazo.
Esas fotos reflejan nuestra historia y producen una nostalgia aguda, más por la juventud de que entonces gozábamos que por los tiempos que corrían.
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