Soliloquio de un hispano/ dirigido a otro, también;/
pero el otro es peruano,/ y el que escribe es del ‘Edén’.
No digas ya más patrañas:
¡Si de aquellos grandes hombres
va su sangre en tus entrañas
y en ti, alguno de sus nombres!
Y, aunque no queráis lleváis
esa ancestral bizarría
que el español poseía,
por donde quiera que vais.
¿Existe mayor hazaña,
Gesta, Epopeya, Iliada…,
que aquella conquista osada
que hizo Pizarro el de España
con cincuenta y seis soldados
a la nación de Perú?
Pues de ellos desciendes tú,
y debes sentirte honrado
y, además, muy orgulloso,
porque merced a esos hechos
puedes ser hoy tan dichoso
gozando de tus derechos.
No hay que dejarse embaucar
por alienantes caudillos
que solo buscan lograr
llenarse bien los bolsillos
sin importarle siquiera
depauperar la nación
ni que su gente se muera
enferma de inanición.
Paradigma es Venezuela,
que quien manda es un tirano,
- indigno venezolano-
forjado en la corruptela.
Con su burda alocución
divide a los ciudadanos
de aquella hermosa nación
como el preboste cubano.
Sí, el ‘comandante’ Fidel
con su infame dictadura,
que ha puesto a Cuba a la altura
de un miserable burdel.
¡Dictador incompetente;
vil carcelero irredento,
con semblante de indigente
y pelamen de jumento!
Ay, si Cristóbal volviera
con sus insignes marinos
en sus veleros y viera
sus predios ultramarinos
en los que COLÓN sudó
por todos sus poros sangre,
y con los suyos sufrió
enfermedades y hambre…,
seguro que se moría
de un ataque al corazón
en su gran SANTA MARÍA,
o perdería la razón.
Diciembre, 0.9 e.v.s.
1 comentario:
Sin pormenorizar ahora en la esencia o argumento que transmiten tus versos, destaco ya en ellos la brillantez de su composición, por su inigualable contundencia semántica, en una cuarteta matemática. Es formidable y a la vez diabólico, más propio de otro tiempo pasado, que fue mejor y más provechoso. Hay en Hispania un grandioso ejercicio de control literario, del lenguaje que hilvana con lupa la etimología en su más pura y rica expresión. Lo bordas, magistral Emilio. Genial y metódico, un lujo al alcance de sensibilidades cultas, doctas y pedagógicas. Brillante, académico y, a la vez, visceral, sintomático y, cómo no, reflexivo para convencernos de que, aunque muchos quieran imponerlo, no hay un pensamiento único; las sociedades son libres para expresarse, incluso sobre su memoria histórica. Que así sea.
Enhorabuena, de veras…
PD (Coda): Subamos a las carabelas…
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