POST INCENDIO

P O S T   I N C EN D I O

Por fin vuelve todo poco a poco a la normalidad,  en cuanto al incendio antes expuesto en este blog, se refiere.

La compañía del seguro (CASER) se ha portado como toda una entidad seria y de altura; la valoración de los daños que hizo el perito de la citada compañía, la han respetado escrupulosamente, y, en función a la misma, se nos ha pagado hasta el  último céntimo. Además, no hubo ni mucha dilación por parte de la descrita compañía de seguros, para efectuar la transferencia bancaria correspondiente al importe de los desarreglos.
En las imágenes se puede apreciar la reposición de los muebles y la calidad de las reparaciones llevadas a cabo, desarrolladas, en su mayoría, por una estupenda empresa de Prado del Rey, denominada Jarillo. Ellos han rascado, reforzado la escayola y han cubierto las fisuras producidas en la misma  por la dilatación; después, sendas capas de revestimiento y pintura, han devuelto el blanco inmaculado a las paredes y techo de mi dormitorio, así como al resto del interior de la vivienda y las fachadas, tanto la principal, como la del lateral derecho.

Aún quedan elementos que no se han colocado, pues, mi mujer, estas cosas las decide con mucha paciencia; además, le gusta elegir lo que ella considera más adecuado para cada lugar, con cautela y procurando acertar, o no desentonar con sus elecciones. Pero, claro, dice el adagio que ‘el libro de los gustos está en blanco’… Y yo soy más funcional para este tipo de cosas, y paso del primor en las decoraciones, etc.

El oficio del grueso de la demografía femenina debería ser el de escaparatistas: qué vocación más fuerte adoptan cuando adaptan el mobiliario y la decoración del hogar para el goce y disfrute de los vecinos, antes que para las necesidades o gustos de los propios inquilinos. Pero, en fin…